Construcción de Refugios en Terrenos Adversos: Guía Completa para Crear un Refugio Seguro y Funcional

En situaciones extremas, cuando las condiciones climáticas son adversas o la permanencia en la zona se prevé prolongada, es esencial saber construir un refugio adecuado. En entornos donde no hay vegetación apropiada o los recursos naturales son limitados, podemos recurrir a materiales como piedras, troncos, adobes o tepes para levantar las paredes y utilizar lajas de pizarra para la cubierta.

Este artículo te guiará paso a paso sobre cómo construir un refugio seguro, funcional y cómodo, optimizando los recursos disponibles de manera eficiente.

Elección y Preparación del Material para la Construcción del Refugio

En primer lugar, debes tener en cuenta lo siguiente al seleccionar materiales:

• Materiales disponibles: Si las condiciones lo permiten, utiliza piedras, troncos, adobes o tepes para construir las paredes. Lajas de pizarra serán útiles para el techo.
• Extracción responsable: Si el uso de estos materiales deja huellas visibles en el terreno, que podrían delatar tu presencia, es recomendable que los extraigas de lugares ocultos entre la vegetación o las rocas para evitar ser detectado.
• Evita materiales que dejen rastro: Si no puedes ocultar la extracción del material, es mejor optar por alternativas más discretas o buscar en zonas menos expuestas.

Ubicación y Diseño del Refugio

La ubicación y el diseño de tu refugio son fundamentales para garantizar comodidad y protección. Aquí te dejamos algunos puntos clave para tener en cuenta:

1. Orientación y Entrada:

• Orientación contra el viento: La entrada del refugio debe estar orientada en dirección contraria al viento dominante. Si no hay viento, lo ideal es orientar la entrada hacia el sur para aprovechar la luz solar.
• Tamaño de la entrada: La entrada debe ser lo suficientemente pequeña para facilitar su cierre y protegerse de los elementos, pero también permitir el acceso cómodo.

2. Terreno en Pendiente:

• Si el terreno está inclinado, asegúrate de que el eje longitudinal del refugio siga la dirección de la pendiente. La cabecera debe estar en la parte más elevada para evitar que el agua entre al refugio.

3. Medidas Funcionales del Refugio:

• Tamaño adecuado: Antes de comenzar la construcción, calcula las medidas mínimas necesarias para que todos los ocupantes del refugio estén cómodos y puedan resguardarse adecuadamente. Cuanto más pequeño sea el refugio (sin sacrificar la comodidad), más fácil será calentar el interior durante el clima frío.

4. Inclinación del Techo:

• Si se espera lluvia o si el material del techo es pesado, es fundamental que la inclinación del techo sea mayor. Esto permitirá que el agua de lluvia fluya adecuadamente, evitando filtraciones dentro del refugio.

Proceso de Construcción del Refugio

1. Construcción de las Paredes y el Techo:

• Comienza de abajo hacia arriba: Cuando estés cubriendo las paredes, siempre comienza desde la base hacia arriba. Lo mismo se aplica al techo, especialmente si tiene pendiente, para asegurar que el agua no se infiltre.

2. Unión de Materiales:

• Uso del alambre: El alambre es el material ideal para unir los travesaños y asegurar las ramas y otros materiales. Si no dispones de alambre, las cuerdas de circunstancias también pueden ser una opción viable.

3. Uso de Ponchos o Plásticos:

• Si necesitas usar un poncho o plástico para cubrir el refugio y no tiene ojales para asegurar las esquinas, puedes utilizar piedras redondeadas o anudar directamente los extremos al armazón para mantener la cobertura en su lugar.

Protección contra la Lluvia: La Importancia de la Zanja

Es crucial proteger tu refugio contra el agua de lluvia. Para ello, deberás rodear el refugio con una zanja para canalizar el agua, evitando que se acumule alrededor de las paredes y se filtre al interior.

Consejos Finales para la Construcción de Refugios

1. Simplicidad y rapidez: En situaciones de emergencia, es importante que el refugio sea lo más eficiente posible. No busques perfección, sino funcionalidad.
2. Aislamiento térmico: Utiliza materiales como ramas, hojas o tierra para aislar el suelo del refugio y mantener el calor en su interior, especialmente si el clima es frío.
3. Condiciones de seguridad: Asegúrate de que el refugio esté alejado de zonas peligrosas como pendientes inestables, áreas con posibilidad de inundación o lugares frecuentados por animales peligrosos.