El fuego Dakota, también conocido como fuego oculto, es una técnica de encendido de fuego utilizada tradicionalmente en situaciones de supervivencia, especialmente en climas fríos. Se llama fuego oculto porque su diseño está pensado para ocultar el fuego y minimizar la visibilidad del humo, lo que lo hace ideal cuando deseas mantener un perfil bajo o no quieres que el fuego sea visible desde lejos. Además, es eficiente en cuanto a la distribución del calor.
El fuego Dakota tiene una estructura subterránea que permite que el fuego se mantenga bien alimentado de oxígeno mientras produce mucho calor sin generar una gran cantidad de humo. A menudo se utiliza en campamentos donde la discreción es importante, como en situaciones de supervivencia o bushcraft.
Características del fuego Dakota:
- Bajo perfil: No hay llamas visibles, lo que lo hace ideal para no ser detectado.
- Menos humo: La estructura subterránea ayuda a que el fuego no produzca tanto humo como un fuego tradicional.
- Eficiencia: Debido a la circulación de aire subterránea, el fuego se mantiene vivo con menos madera.
- Ideal para calentar: Proporciona calor directo, pero de manera controlada.
Cómo hacer un fuego Dakota (paso a paso):
Materiales necesarios:
- Yesca (corteza de abedul, piña, musgo, o cualquier material que se encienda con facilidad).
- Madera fina (ramas o astillas pequeñas).
- Madera gruesa (para mantener el fuego una vez que esté encendido).
- Pico, pala o cuchillo (para excavar el agujero).
- Pedernal y acero o fósforos (para iniciar la chispa).
Paso 1: Seleccionar un lugar adecuado
- Elige un terreno limpio y nivelado, alejado de ramas bajas o material inflamable.
- Si el terreno está muy húmedo, busca un lugar más seco o un poco más elevado para evitar que la humedad del suelo apague el fuego.
Paso 2: Excavar dos hoyos
- Cavar el hoyo principal: Excava un hoyo de aproximadamente 30 a 45 cm de profundidad y de unos 30 cm de ancho. Este hoyo será la base de tu fuego, donde se colocará la madera y la yesca.
- Cavar el conducto de aire: A un lado del hoyo principal, excava otro hoyo más pequeño, a unos 30 cm de distancia del primero. Este hoyo será el conducto de aire que llevará oxígeno al fuego desde el exterior. El conducto debe ser inclinado hacia abajo, de manera que se conecte con el fondo del hoyo principal. La idea es que el aire fresco entre por aquí y alimente el fuego.
Paso 3: Colocar la yesca y la madera fina
- Coloca una capa de yesca en el fondo del hoyo principal (la parte más profunda). Asegúrate de que haya suficiente material seco para que el fuego se encienda fácilmente.
- Sobre la yesca, coloca madera fina en forma de pirámide o tipi. Esto permitirá que el fuego se propague más rápido y de manera eficiente.
Paso 4: Encender el fuego
- Usa un pedernal y acero o fósforos para encender la yesca en el fondo del hoyo principal. Una vez que la yesca se encienda, el fuego debería comenzar a consumir la madera fina.
- Si el fuego no se enciende de inmediato, espera un momento y sopla suavemente para proporcionar oxígeno. La madera más fina debería arder rápidamente.
Paso 5: Agregar la madera gruesa
- Una vez que el fuego haya comenzado a arder de forma estable, comienza a agregar madera más gruesa. Coloca la madera en el hoyo principal, asegurándote de que quede un pequeño espacio para que el aire entre por el conducto.
- Al agregar madera gruesa, asegúrate de no bloquear completamente el conducto de aire para que el fuego siga recibiendo oxígeno. Mantén una estructura de madera que permita la circulación del aire.
Paso 6: Mantener el fuego
- El fuego Dakota es muy eficiente y no necesita tanta leña como otros tipos de fuego. Solo debes agregar madera gruesa cuando notes que la llama empieza a apagarse. Como el oxígeno circula por el conducto subterráneo, el fuego se mantendrá encendido con poca madera, lo que lo hace ideal para climas fríos o largos períodos de tiempo.
- Si el fuego parece estar apagándose, revisa que el conducto de aire no esté bloqueado y asegúrate de que la madera siga estando en contacto con la yesca.
Consejos adicionales:
- Protege el fuego: Si hace viento, cubre el fuego con piedras alrededor para evitar que el viento lo apague.
- Uso de piedras: Puedes colocar piedras dentro del hoyo para ayudar a concentrar el calor hacia arriba.
- Comprobación de la circulación del aire: Asegúrate de que el conducto de aire no esté obstruido y que el oxígeno llegue adecuadamente al fuego.
- Control de la visibilidad: Como el fuego Dakota está casi completamente cubierto, produce muy poco humo, lo que lo hace ideal para no ser detectado.
Ventajas del fuego Dakota:
- Bajo perfil y discreto: Es ideal para mantener un fuego sin ser detectado, lo que es perfecto en situaciones de supervivencia donde se desea discreción.
- Menos humo: Debido a su construcción subterránea, produce menos humo, lo que es útil si no quieres llamar la atención.
- Eficiencia: El fuego Dakota es extremadamente eficiente en el uso de madera, lo que es una ventaja si tienes recursos limitados.
- Durabilidad: Al estar parcialmente subterrado, el fuego puede durar mucho tiempo sin necesidad de agregar constantemente leña.
Conclusión:
El fuego Dakota es una excelente técnica para mantener fuego de manera discreta y eficiente. Su diseño subterráneo lo hace ideal para situaciones en las que el humo debe minimizarse, como en la supervivencia, el bushcraft o en campamentos donde se requiere calor sin llamar la atención. Siguiendo estos pasos y consejos, podrás disfrutar de un fuego que te ayudará a cocinar, calentar y mantenerte seguro en tus aventuras al aire libre.
Erik el rojo 