La destilación es un método eficaz para potabilizar el agua, ya que elimina impurezas, microorganismos y sales disueltas. Se puede realizar de dos formas principales:

1. Destilación Natural (por energía solar)

Este método imita el ciclo del agua en la naturaleza.

• Se coloca agua contaminada en un recipiente oscuro.
• Se cubre con un plástico transparente inclinado hacia un recipiente recolector.
• El sol evapora el agua, que se condensa en la superficie del plástico y gotea en el recipiente limpio.

2. Destilación Forzada (mediante calor artificial)

• Se calienta el agua hasta hervir en un recipiente cerrado.
• El vapor generado se dirige a un tubo de condensación (puede ser un serpentín metálico enfriado con agua o aire).
• El agua destilada se recoge en otro recipiente, libre de contaminantes y microorganismos.

Este método es especialmente útil en situaciones de emergencia o en lugares con agua altamente contaminada. Especialmente últil si tenemos que purificar agua de mar.