
¡Clásico problema! Aquí te van algunos trucos fáciles para evitar que el azúcar moreno se ponga como una piedra:
1. Guárdalo con algo que mantenga la humedad
- Trocito de pan de molde: Coloca un pedazo dentro del envase. El azúcar absorberá la humedad del pan y se mantendrá blando.
- Rodaja de manzana o cáscara de naranja: Hace lo mismo, pero aporta un ligero aroma (ojo con la manzana, cámbiala cada par de días para que no se eche a perder).
2. Usa un recipiente hermético
- Asegúrate de que esté bien cerrado para que no entre aire. Cuanto más hermético, mejor.
3. Truco pro: disco de terracota
- Puedes comprar un disco de terracota (o usar uno pequeño de maceta bien limpio). Lo mojas un poco, lo secas para que no esté chorreando, y lo metes con el azúcar. Se mantiene en la humedad perfecta. Esto funciona de maravilla.
