La Última Palabra de Skarn

Aquel que haya llegado hasta el final de este grimorio, que haya recorrido los oscuros senderos de la magia prohibida, debe saber que las palabras aquí escritas no son meras fórmulas o conjuros. Son puertas. Puertas que conducen a lugares donde ni siquiera las estrellas se atreven a brillar.

Yo, Skarn el Susurrador, he dejado mi sangre sobre estas páginas, he consagrado mi ser en cada invocación, en cada runa. Lo que aquí se revela no es conocimiento. Es poder, sí, pero también es condena.

Los hechizos que aquí se encuentran no están destinados para los corazones débiles ni para las mentes inestables. El precio de la magia prohibida no se mide en oro ni en riquezas materiales, sino en algo mucho más profundo, algo que no puede ser devuelto. Quien cruce la frontera de estas artes enfrentará la oscuridad no sólo en su entorno, sino en su propio ser. La magia negra no es un poder que se posee; es un vínculo que se establece con fuerzas que no conocen compasión, ni moralidad, ni fin.

He aquí lo que ocurre cuando uno se atreve a tocar lo inalcanzable: la razón se quiebra. El alma se retuerce. Los propios límites de la existencia se disuelven. Y, cuando menos lo esperas, aquello que buscabas controlar… te controla a ti.

Pero, aún así, sigo escribiendo. Porque hay aquellos que se sienten atraídos por el abismo. Aquellos que desean ver más allá del velo, aún sabiendo que el precio es la locura. Y si este es tu destino, si has llegado hasta aquí, entonces ya no hay retorno. La sed de poder, de conocimiento absoluto, consume a muchos. Y aquellos que caen en ella, quienes buscan hacerla suya, terminan perdiéndose a sí mismos.

Mi advertencia final es esta: cuando utilices estos conjuros, recuerda que el vacío nunca perdona. No es un aliado, ni un enemigo. Es la nada, la ruptura misma, y aquellos que invocan su poder quedan, inevitablemente, marcados por él. Ya no hay marcha atrás. No lo olvides.

Que las sombras sean tu guía, o tu perdición. Elige sabiamente, si aún puedes.

Skarn el Susurrador

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