Primera bailarina

«Primera Bailarina» (1995) Óleo sobre lienzo, 81 x 54 cm

En «Primera Bailarina», Agustín Irusta nos sumerge en la elegante y enigmática figura de una bailarina, capturada en un momento de introspección y gracia. Pintado en Bilbao en 1995, este óleo sobre lienzo de 81 x 54 cm es un testimonio de la maestría del artista en el retrato y la representación de la figura humana.

El cuadro destaca por su paleta de colores cálidos y el uso magistral de la luz, que ilumina suavemente la piel de la bailarina y el blanco puro de su vestuario, contrastando con el fondo oscuro que acentúa su presencia. La composición, con los brazos elegantemente cruzados y la mirada dirigida hacia arriba, transmite una sensación de anhelo y dedicación, característica del mundo del ballet.

El estilo de Irusta se manifiesta en la delicadeza de los trazos y la atención al detalle, desde la textura de las plumas en su cabello hasta la expresión sutil de su rostro. La tiara, que evoca la corona de un cisne, y la postura clásica sugieren una inspiración en ballets icónicos, quizás «El lago de los cisnes», dotando a la obra de una narrativa visual rica y atemporal.

«Primera Bailarina» no solo es un retrato; es una oda a la disciplina, la belleza y la emoción que encarna el arte de la danza. Una pieza que invita a la contemplación y revela la profunda conexión del artista con sus sujetos.

Cuedro firmado tambien en el reverso. Dispone de certificado de autenticidad.